Enseñando la Generación del 27 en NY.
Hablamos de lo frágil, de lo inerte,del enigma que envuelve a la poesía,
sentimos con Guillén el mediodía,
sin nombrarla Salinas la hizo fuerte,
Cernuda os deslumbró y tuve suerte,
Diego fue el Duero y Lorca profecía,
Alberti iluminó de pedrería
lo que Aleixandre oscureció de muerte.
Quise trazar en campos de ceniza
un camino con más de dos salidas,
lejos del barrio gris y la maleza.
Cada día la nieve de la tiza
escribía con sangre en vuestras vidas
un poema de fuego y de belleza.