LA POESÍA COMO CAMINO DE SALVACIÓN
Arqueología de un milagro
Jesús Aparicio
Ruleta rusa ediciones, 2017
Con diez libros ya publicados la obra de Jesús Aparicio (Brihuega, 1961) ocupa un lugar importante en el panorama poético español. Arqueología de un milagro, con un precioso dibujo de portada por Pablo Aparicio Resco, se afianza en asegurar ese lugar ganado libro a libro. Jesús Aparicio es un poeta que escribe sentado a la derecha del Padre y se siente arropado por la sombra divina. Entrar en uno de sus libros es como entrar en una realidad, en el mundo que nos rodea, sentirse abrazado por rostros, objetos humildes, lugares sencillos, momentos cotidianos, la noche, el jardín, el verano, la oficina, la mañana.
AMOR LÍQUIDO
Llega el amanecer
con un vaso de agua
y responde a tus ojos
recién abiertos
que otra vida no hay
fuera de ese amor líquido
que le da transparencia.
La poesía de Aparicio pide calma y recogimiento porque a veces es una oración, un salmo, un sobresalto, un arrebato de sensatez, una homilía casera, un sermón laico, siempre una oleada de claridad y luminosidad. Uno entra en este libro a presenciar un milagro con los ojos llenos de carbón y sale lleno de luz.
ARQUEOLOGÍA DE UN MILAGRO
Luz que al despertar
ha engendrado la llama,
aire que la mantiene
y aviva las palabras
que eternas permanecen
fluyendo como el agua
y que en la tierra siembran
silencios que son almas.
Polvo de las estrellas
que el poema levanta:
fragmentos de una vida
que crece si se apaga.
Es una poesía desnuda, breve, limpia de polvo y paja, tocada de un misticismo cotidiano, de una sensación cósmica en el jardín del poeta, en el mundo bien hecho del poeta. No busca Jesús Aparicio el ruido falso de la vida, la ahuecada belleza que pasa, el afectado artificio de la sociedad. El poeta busca a lectores que estén solos y necesiten un amigo, lectores que buscan una palabra sincera y verdadera. El poeta no tiene prisa, son sus sentimientos rectos y verdaderos, sin fingimientos ni “Imposturas”, de donde es este fragmento:
…Yo escribo de las cosas
-léase también almas-
que quiero conocer y son distintas
a todo porvenir sensatamente preparado:
de ese que tú me cerca entre cielo y pared
para entregarme al lobo del olvido
con un beso.
Si, como decía Shelley, “Poetry is indeed something divine”, Arqueología de un milagro es un libro humanamente divino que nos enseña la belleza que otros no vemos, que nos abre ventanas, que nos muestra a rostros que pocos miran y a olores que pocos huelen. Un libro en apariencia franciscano, cuyos poemas, que pueden aparecer envueltos en ropajes sencillos, también son bombas de justicia social que pueden explotar en nuestro corazón.
CIRCULO Y VACÍO
Si no te amas
has perdido tu nombre,
Si has perdido tu nombre
no escucharás a nadie,
Si no escuchas a nadie
no abrirás la puerta de tu casa,
Si no abres la puerta de tu casa
nadie compartirá tu mesa,
Si nadie comparte tu mesa
no aprenderás a amar
y nunca te amarás.