El soneto tercero de la Antología de poetas toledanos menores fue escrito por María Loreto
Muñoz Díaz de Haveze, conocida como “la hija del magistral”. Una poetisa que
vivió a finales del XVIII y a principios del XIX. Poco se sabe de su vida. Nació
en Bargas, su padre fue un canónigo de la catedral de Toledo, conoció a
Carolina Coronado y a Bécquer y nunca se casó. Fue amiga íntima de la primera
directora del penal de Ocaña, pionera en llevar pantalones y de fumar en público.
Nuestra poetisa escribió poco. A su muerte, su íntima amiga publicó, en la
Imprenta de la Editorial Católica, un opúsculo titulado (dicen que por don
Marcelino Menéndez y Pelayo) “Libro del mal amor” del que se conserva una copia
en la Biblioteca de Abelardo Seville Linares. Este soneto lo hemos encontrado
en un legajo guardado en la Biblioteca de Central de Brooklyn que contiene
dibujos y recortes de periódicos toledanos. Hay una frase escrita a lápiz que
dice: “Sonetos de la Barrett Browning de Bargas. A gift from HB”.
Muñoz Díaz de Haveze, conocida como “la hija del magistral”. Una poetisa que
vivió a finales del XVIII y a principios del XIX. Poco se sabe de su vida. Nació
en Bargas, su padre fue un canónigo de la catedral de Toledo, conoció a
Carolina Coronado y a Bécquer y nunca se casó. Fue amiga íntima de la primera
directora del penal de Ocaña, pionera en llevar pantalones y de fumar en público.
Nuestra poetisa escribió poco. A su muerte, su íntima amiga publicó, en la
Imprenta de la Editorial Católica, un opúsculo titulado (dicen que por don
Marcelino Menéndez y Pelayo) “Libro del mal amor” del que se conserva una copia
en la Biblioteca de Abelardo Seville Linares. Este soneto lo hemos encontrado
en un legajo guardado en la Biblioteca de Central de Brooklyn que contiene
dibujos y recortes de periódicos toledanos. Hay una frase escrita a lápiz que
dice: “Sonetos de la Barrett Browning de Bargas. A gift from HB”.
- DOCE ROSAS
Ayer iluminaban nuestras cosas
reflejándose el sol en sus colores,
doce rosas de sangre, doce olores,
una docena de rebeldes rosas.Hoy humillan su cuello cancerosas,
momias de soledad, hondos temblores,
perdidos paraísos de sabores,
doce osarios de polvo, doce fosas.Ayer la rosa de tu madrugada
abrasaba mi cuerpo con su fuego,
una hoguera de amor en nuestras vidas.Hoy mi herida te nombra enamorada,
doce rosas de gozo y de sosiego
dos docenas de rosas encendidas.